Friday, September 22, 2006

El ciclista (2)

Seguí ascendiendo montañas, recorriendo llanuras. Asumí mi condición de perdido. El ciclista eterno, siempre pedaleando hacía adelante y así viví años, varios años. En todo ese tiempo, sin saber donde estaba, sucedieron cosas, pero la mayor de las cosas fue la constante soledad, la inmensidad y yo, el asfalto negro y mis pensamientos en constante movimiento. Hubo agotamientos, felicidades, momentos sin mas. Hubo de todo, hubo nostalgia y hubo intensidad y siempre, siempre las ruedas girando, una vuelta, otra vuelta, así, eternas, como todos los ciclos, que empiezan y terminan, y vuelven a empezar y a terminar.La rueda sobre el asfalto. Perdí la noción del tiempo, perdí,claro está, la noción de espacio, solo sé, o solo sospeché que habían pasado muchos dias, muchos meses, quizá algunos años. Hasta hoy, hasta esta tarde que todo se detuvo. Las ruedas, el asfalto, mi ritmo cardiaco.Todo, de repente, y despues de tanto tiempo, se quedo estático. En lo alto de un puerto, en la soledad de la altura oí una voz y miré hacia arriba, fue entonces cuando descubrí, atrapada en un árbol a una chica de unos veinticinco años, estaba rodeada por unas cuerdas y le pregunté: "¿como has llegado hasta ahí?, ¿cuanto tiempo llevas colgada?" y ella me contestó:.- Llegué arrastrada por mi cometa. El tiempo no sé, solo recuerdo que era una niña cuando el viento y la cometa me arrastraron desde aquella playa.