ideas que pasan y se van

Hay un montón de ideas que pasan y se van. Una especie de oleaje que revienta y se acaba deshaciendo en espuma invisible, tragada por la arena insaciable del tiempo. Vienen esas ideas y parecen una tormenta eléctrica, todo se agita cuando truenan en la cabeza. Hay un instante en que se ve clarísimo, la idea ilumina todo, hasta la existencia, la idea es la dueña absoluta de lo que sucede. Puede ser la imagen para arrancar un cuento corto ó un gesto para dibujar algo o a alguien,puede ser un compás, una melodía o la escena que trascurre en un bar,un dialogo, un trazo, una textura. Es algo, invisible, pero lo abarca todo. Quieres convertirlo, o de alguna manera traducirlo. Llevarlo a ese lenguaje. El momento ó la ensoñación se van desdibujando y corres rápido a dejar un algo de eso que te vino y que ya se está yendo muchas vceces no da tiempo, cuando llegas al papel, a la cámara, al lápiz, al instrumento ya no queda ni la sombra de aquel trueno, ni un vestigio de aquella luz. Otras si llegas a tiempo, te sientas ante la hoja en blanco y cuando comienzas la traducción descubres que si, que la luz era sublime, pero que tu traducción se queda tenue, no tiene esa potencia, ese brillo. Ves allí donde sucedió la tormenta, donde rompió la ola y ves lo que tu has tarido y en nada se parece. Y asi sucede una y otra vez, llega la tormenta, llega el entusiasmo, llegala traducción y nada.